Poyó
Las relaciones interpersonales dentro del entorno familiar suelen ser poderosas. Los padres buscan el bienestar para sus hijos por el paso de los años y la dinámica social jugada en el rol de padre e hijo es única y especial.
Poyó es un banco que prueba que el paso de los años no debe afectar a ningún producto ni dejar de ser útil. Está diseñado con un ensamble simple y versátil, puedes montar y desmontar. Tiene la capacidad de transformarse de un banco para una persona adulta a una mesa para los pequeños del hogar. Su doble función permanece oculta a simple vista. Quién lo conozca, sabrá que podrá modificarlo y hacerlo funcionar de forma distinta y para un usuario distinto.
Karina Ochoa Chapa
CEDIM
Monterrey
Madera de banak y cera de abeja.